EL NUEVO SUBSISTEMA DE FORMACION PARA EL EMPLEO

En los años que llevo trabajando como orientador laboral, siempre me ha llamado la atención la cantidad de dinero que se invierte cada año en formación ocupacional no reglada. Hasta ahora, la formación profesional en España se ha dividido en tres subsistemas: la formación profesional reglada (competencia del Ministerio de Educación), la formación profesional no reglada u ocupacional (competencia del Ministerio de Trabajo) y en último lugar la formación continua o para trabajadores (competencia de la Fundación Tripartita).

Dentro de los dos últimos subsistemas cada año hay a disposición de los desempleados y trabajadores una ingente cantidad de cursos con el objetivo de una mejor cualificación e inserción laboral; en el caso de los desempleados se ha hecho a través del Plan FIP (Formación e Inserción Profesional), y en caso de los ocupados a través de los planes sectoriales e intersectoriales anuales.

A partir del Real Decreto 395/2007, se fusionan los dos últimos subsistemas, pasando a denominarse subsistema para la formación para el empleo. No voy a entrar en detalles aquí para no extenderme, pero en definitiva ésto supone la unificación de la formación para desempleados y ocupados (hasta ahora, como ya comenté más arriba, tenían planes de formación diferentes).

La primera ventaja que veo es que a partir de este momento cualquier persona, ya esté en situación de desempleo u ocupado pueda hacer el mismo tipo de formación. En segundo lugar, tal y como viene reflejado en el decreto, se potencia la formación a distancia y la teleformación, con el fin de facilitar el acceso a las acciones formativas.En tercer lugar, como una de las novedades más destacadas, aparecen los centros integrados de formación. Estos centros están dirigidos a impartir una formación integral, es decir, que puedan incluir en sus programas tanto formación reglada (ciclos formativos), como no reglada u ocupacional.

En resumen, estamos ante una nueva etapa en donde desaparece la antigua competencia existente entre formación para desempleados y ocupados. La pregunta es la siguiente: ¿realmente se está adaptando la formación al mercado de trabajo? ¿Faltan o sobran profesionales en nuestro mercado?

O.S.L.